INVERSION SEGURA

Sabemos que al momento de hacer una inversión, debemos tener en cuenta el monto que destinamos a ello, la confiabilidad y seguridad que nos ofrece dicha operación.

El matrimonio es una gran inversión y tiene la seguridad de haber sido establecido por Dios (Génesis 2: 18 - 22: 24, Mateo 19: 4 - 6); ¿sabemos cuánto hemos invertido en nuestro matrimonio?

Muchos piensan que invirtieron demasiado de novios, al momento de casarse y en sus primeros años, y con eso basta!. Y así creen que les es otorgado el derecho de obtener las ganancias de su matrimonio y no invertir "ni un centavo" para mejorarlo.

Esa pasividad daña la vida conyugal, pero algunos prefieren asumir las pérdidas, el fracaso o a buscar alguna manera de salvar la relación matrimonial.

Sin embargo, existen algunos más sabios, que al darse cuenta que no saben de donde sacar más recursos, los buscan en Aquel que no sólo tiene todos los recursos necesarios, si no el mayor interés de que tengan un matrimonio felíz, prosperado y continuamente renovado: Dios.

Si usted y su conyugue van a Dios y abren su corazón confesándole sus limitaciones y pidiendo visión sobre la importancia del renuevo en su relación en todos los aspectos, le estarán dando la oportunidad de hacer lo que no han logrado, traer a la existencia lo que no existe y vida a lo que creiamos que estaba muerto.

¡Créa, practique y vea lo que es capaz de hacer este gran inversionista: Dios!

Adaptado de Matrimonios ¿un jardín de sueños?