¿PREOCUPADAS U OCUPADAS?
>> lunes, 7 de septiembre de 2009 –
Hijos

En diversas oportunidades la gran preocupación que tenemos las mamás es que nuestros hijos repitan nuestra historia de vida, que se equivoquen en las decisiones que deben tomar y es así que vivimos en constante obseción al tratar de evitarles cualquier angustia.
Evaluamos si van por el camino correcto, si se equivocan o no, y juzgamos sus decisiones y allí estamos sobreprotegiendolos de todo sin darnos cuenta que en ciertos casos creamos situaciones de asfixia hacia ellos.
Vivimos comparando el temperamento, la conducta, la impulsividad y la pasión de nuestros hijos con lo que nosotras solíamos ser en la infancia, adolescencia y en la juventud, es por eso que nos vemos reflejadas en sus reacciones y no queremos que se repitan en ellos nuestros errores.
Es sano poder detenernos y evaluar que cosas impiden el bienestar de nuestros hijos y el nuestro propio.
El cometer errores no es tan grave, teniendo en cuenta que lo importante es aprender de ello y no volver a cometerlos.
No te culpes por sus debilidades, por sus errores, por sus decisiones no acertadas, no existe un modelo perfecto, ni un libro que nos enseñe como llegar a hacerlo, y si lo hubiera nuestros hijos necesitan muchas más que una mamá que vea sus equivocaciones, y a la que en todo momento hay que satisfacerla y hacerla sentir orgullosa.
Tus hijos te necesitan a vos, a esa mamá que es capaz de transmitirles paz, fe, convicción, principios, objetivos, sueños, proyectos, propósitos, que sobre todas las cosas les enseña a amar la vida y su propósito de vida, una mamá que les ayuda a construir sus metas, que los alienta, que los incentiva, los acompaña en el camino hacia la afirmación y la validación que necesitan alcanzar como personas.
Tal vez tus hijos no tienen proyectos, ni sueños ni metas y cada día tenes temor por el futuro de ellos y te preguntas ¿que será de mis hijos cuando ya no este? y te encuentras angustiada y desanimada.
Pero hay algo que podes comenzar hacer hoy, y es aprender a cambiar tus palabras sobre la vida de tus hijos, habla lo que no es como "si fuera" y velos a alli, en la universidad, con buenas amistades, sanos, con objetivos, con una mente con creencias verdaderas y no estoy diciendo negar lo que sucede, sino que estarás determinando con tus palabras el lugar que ellos alcanzarán.
...."No temas cree solamente" Mr. 5:36
...."Para el que cree todo es posible" Mr 9:23
Adaptado de Mis hijos me vuelven loca.
Alejandra Stamateas.
GRACIAS